Investigadores del Instituto de Salud Mental y del Instituto de Cáncer y Ciencias Genómicas de la Universidad de Birmingham (UK) han identificado un posible vínculo entre inflamación y estructura de regiones específicas del cerebro. El estudio, publicado en JAMA Psychiatry, demostró que los genes asociados a la inflamación, en particular la interleucina (IL) 6, están relacionados con una reducción del volumen de sustancia gris en determinadas zonas del cerebro implicadas en los trastornos neuropsiquiátricos, por lo que estos hallazgos pueden ser especialmente relevantes en el espectro autista y la esquizofrenia, abriendo un objetivo completamente nuevo para el tratamiento farmacológico de estas alteraciones.